Trabajo
Me ha pasado en un sinnúmero de ocasiones el que, inconsciente o deliberadamente, gente se apropiase de mi trabajo. para ser completamente sincera, se ha tratado casi siempre de varones, en ocasiones mis superiores, en ocasiones compañeros con mi mismo nivel jerárquico, en otras, personal al que yo daba seguimiento.
Tomé conciencia de esta práctica gracias a dos compañerxs con los que trabajé hace algunos años:
Ella repetía en muchas ocasiones hablando de la cultura de trabajo “una idea es buena cuando se la ha apropiado el jefe”. Y, en realidad, acertaba: las ideas salían adelante cuando el superior las hacía literalmente suyas.
Él, que era mi superior, insistía siempre en mencionar los trabajos que, aunque realizásemos en equipo, yo había liderado y realizado en mayor medida. Me repetía siempre “yo no me apropio del trabajo de nadie”.
Me resulta enormemente desagradable esta práctica. Creo que a veces se hace conscientemente y que en otras se tiene tan normalizado que sale ya inconscientemente.
Obviamente, impacta en las carreras profesionales de mucha gente y me atrevería a decir que nos toca más a las mujeres.
Es esencial trabajar esto en la cultura de cada organización.